El envejecimiento es un proceso fisiológico e inevitable, todos los seres vivos envejecen. En el ser humano los primeros signos son la aparición de arrugas en cara y cuello y la pérdida de la definición de las facciones faciales.
El lifting es un tratamiento que ayuda a mejorar el aspecto, devolver el tono cutáneo y recuperar los puntos de luz junto con los relieves faciales. Proporciona un efecto de rejuvenecimiento y vitalidad que el tiempo había hecho desaparecer.
Existen muchas técnicas quirúrgicas para el tratamiento del envejecimiento facial. En su visita a Clínica Image se le indicarán las intervenciones más adecuadas para ayudarle a mejorar su aspecto.
Todos los pacientes que acuden a Clínica Image, son valorados médicamente antes de cualquier intervención.
Se valorará su caso específicamente, explorando su estructura facial, su tipo de piel, los depósitos grasos en su cara y sus patologías asociadas. Basándonos en estos datos, se le aconsejarán las técnicas quirúrgicas más adecuadas para poder mejorar su problema.
Solicitaremos pruebas complementarias como análisis, radiografías, ecografías, ECG,…
Antes de la cirugía, hablaremos sobre los resultados predecibles, las técnicas anestésicas y los riesgos que comporta un lifting.
Desde 1992 realizamos esta intervención rutinariamente con anestesia local más una suave sedación, consiguiendo con ello una recuperación rápida y unas molestias quirúrgicas mínimas.
En su visita médica con el servicio de anestesiología, el paciente podrá escoger entre anestesia general y local. Pudiéndole preguntar todas sus dudas sobre el procedimiento anestésico dándole una valoración ASA de riesgo quirúrgico anestésico. Esta valoración mide el riesgo quirúrgico anestésico, solo aceptamos pacientes con ASA I y ASA II, que son pacientes sin enfermedades o con una enfermedad controlada.
La duración de la intervención es inferior a 2 horas, alargándose un poco más si se corrigen las bolsas de los párpados (Blefaroplastia), o se corrige la forma de la nariz (Rinoplastia).
Los signos de envejecimiento facial suelen ser progresivos. Se inician alrededor de los ojos, pómulos, patas de gallo, mejillas, arrugas en frente y labios, cuello... El tratamiento quirúrgico variará dependiendo de los signos actuales de envejecimiento.
* Si su problema es en el tercio superior de la cara:
* Si su problema es en el tercio medio de la cara, en la zona del mentón y la mejilla :
* Si su problema es en el cuello:
Después de un lifting, el rostro presenta un aspecto más o menos hinchado en función de la extensión del trabajo realizado y de las características propias de cada paciente.
Aconsejamos un ingreso de entre 8 a 24 horas, para así poder retirar los vendajes, drenajes y lavar el pelo, así el paciente puede marcharse a su domicilio con total comodidad.
Tras el lifting, es habitual que sienta la piel de la cara algo 'acolchada'. Esta sensación es transitoria y desaparece en unas cuantas semanas. También es normal que el rostro esté inflamado y presente moraduras. Si sigue las instrucciones del médico, estos efectos sólo durarán entre 10 y 15 días..
Es aconsejable que no trabaje y que evite los ejercicios o actividades violentas como mínimo durante las dos semanas siguientes a la operación. La piel de la cara necesitará cuidados específicos y no deberá exponerla al sol o a rayos UVA durante al menos tres meses.
Aunque al principio pueda preocuparle el aspecto de su cara, piense que la mayoría de los pacientes regresan a una vida normal (incluyendo su trabajo) en una o dos semanas. En este período la inflamación se normaliza y desaparecen las moraduras. Las cicatrices tardan algunas semanas más en disimularse, pero finalmente se hacen prácticamente imperceptibles.
El proceso de cicatrización acostumbra a normalizarse tras dos meses de la intervención. Transcurrido este tiempo, se considera que el resultado ya es estable.
El lifting de cara y cuello devuelve la firmeza perdida y rejuvenece el aspecto. Aquellas personas que se han sometido a este tratamiento muestran un elevado nivel de satisfacción y unos resultados espectaculares. El rostro recupera naturalidad, una lozanía y tersura que en ocasiones parecían perdidas. La mejora es visiblemente apreciable.
No hay edad establecida, el momento adecuado es cuando el paciente lo considera oportuno.
Habitualmente, después de tres semanas podrá reanudar la vida social y laboral. El hecho de que los resultados sean naturales hace que no se note la operación.
No, aunque la sensación de tensión y hinchazón de los primeros días son un poco molesta.